El directivo más buscado por las empresas en post-pandemia

Si hay algo que la pandemia ha dejado claro en el ámbito empresarial es que va a ser cada vez más común, a partir de ahora, vivir situaciones de incertidumbre que no responden a patrones antes vistos y conocidos. Las organizaciones que sobreviven son aquellas que aprenden a vivir en este estado. Que se adaptan a los continuos cambios y muestran agilidad para repensar y reinventarse cuando sea necesario. Para ello, el perfil directivo que necesitan estas organizaciones también ha cambiado. Un perfil directivo con una serie de habilidades y competencias que les permita, no solo adaptarse a los cambios, sino anticiparse e incluso provocarlos.

¿Qué características debemos buscar en un perfil directivo que pueda llevar al éxito a nuestras empresas en este nuevo paradigma?

  • Lo primero de todo es asumir y tomar consciencia de que el modelo de organización ya ha cambiado. Ya no vale lo que antes era la clave del éxito. Se hace necesario realizar un trabajo de análisis para detectar errores en los anteriores modelos de dirección. Identificar qué aspectos hay que modificar, cuáles ya no nos valen y adoptar nuevos estilos de liderazgo. Hay que transformar los viejos estilos autoritarios, modelos de dirección poco organizados y adoptar metodologías basadas en la comunicación, en el ejemplo y el uso de herramientas digitales.

 

  • El nuevo directivo tiene que ejercer ahora en un entorno virtual. En muchas ocasiones, con equipos muy dispersos y a través de canales digitales. Velando que la comunicación se realice de la misma forma que en la presencialidad y que cada miembro del equipo esté alineado con la estrategia y los objetivos marcados.

 

  • Las competencias, ya no solo transversales o softskills, sino las digitales, se hacen indispensables. El nuevo directivo tiene que adquirir una serie de habilidades y conocimientos en el uso de las tecnologías en su ámbito de aplicación, conocer qué metodologías y herramientas digitales existen y aplicarlas. Así mismo, hacerlas extensibles a sus equipos y formarlos para capacitarlos para adaptarse a estos cambios.

 

  • La adaptación a los cambios también requiere que el directivo adopte un modelo de dirección frente a objetivos, teniendo en cuenta el entorno y su equipo. Sabiendo adaptarse en cada momento a las necesidades de la organización. Transmitir esto a sus equipos es fundamental. En un modelo en el que se fomenta el teletrabajo y/o el trabajo híbrido, a veces con distintos horarios, se hace necesario dejar claros los objetivos y transmitir la necesidad de alinearse con los mismos, más allá de la tradicional presencialidad y cumplimiento de horarios. Esto empodera a los trabajadores, pero también le requieren un componente de responsabilidad.

 

  • Una característica fundamental, el directivo o líder del futuro (ya del presente) tiene que ser súper proactivo. Entender, antes que nadie, la necesidad de adaptación y poner en marcha internamente los cambios necesarios. Transmitirlo a los equipos y conseguir que la organización sea lo más ágil posible. El directivo que no cumpla con esta premisa, significará un freno para la adaptabilidad y buena marcha de la organización, en un nuevo paradigma, destacado por la incertidumbre y los continuos cambios.

Además de estas características fundamentales, es importante que el nuevo directivo ejerza de “punta de lanza”, allanando el camino y facilitando los cambios en la organización para sus equipos. Una especie de “pegamento” para conseguir un equipo cohesionado y trabajando con un propósito común. Además de una fuente de motivación para que los miembros de la organización trabajen alineados y con pasión por el trabajo que realizan.


Claves para proteger tu equipo de trabajo este verano

Con las vacaciones de verano ya a la vuelta de la esquina, aumenta el número de profesionales que trabajan en remoto. Y es que, según el análisis de tendencias sobre el teletrabajo de Alares y Fundación Alares, uno de cada dos trabajadores tiene pensado viajar y teletrabajar en las próximas semanas. Sin embargo, el estudio también revela que los conocimientos y la formación en ciberseguridad continúa siendo una tarea pendiente, tanto para los trabajadores como para las propias empresas.

 

Si para muchos de vosotros comienza una merecida temporada de vacaciones de verano, para los ciberdelincuentes comienza “la temporada alta” de trabajo. Pues, aprovechando el incremento del consumo de Internet en estas semanas (desde dispositivos móviles, ordenadores públicos y redes inalámbricas), les resulta muy sencillo interceptar el tráfico de datos y robar contraseñas, números de tarjetas bancarias y otros datos personales.

 

Por ello, recomendamos que tengas en cuenta estos pequeños detalles de seguridad que harán que te mantengas a salvo de estos “hackers” mientras disfrutas de unos días de descanso: ¡Toma nota!

  1. Activa tu antivirus y mantenlo actualizado. Instala un software de seguridad en todos los dispositivos que vayas a usar durante las vacaciones: portátil, tablet, móvil…. Contribuirá a la protección de tu equipo, aunque no es una garantía de que no vayas a pillar un virus. Además, mantén actualizadas todas las aplicaciones, sobre todo tu sistema operativo. Con esto estarás bastante protegido y se lo pondrás más difícil a los cibercriminales.

 

2. Realiza copias de seguridad. Haz copias de seguridad de la información que lleves de vacaciones y ponla a buen recaudo. Esto minimizará el posible riesgo de que puedas perder algún dispositivo o se infecte con algún virus y, con ello, pierdas toda la información contenida.

 

3. Evita las redes inalámbricas públicas. Ten cuidado con las redes inalámbricas gratuitas en sitios públicos (restaurantes, hoteles, aeropuertos, estaciones…). Pueden ser un recurso para consultar cualquier cosa en internet, pero evita su uso para acceso a sitios privados donde tengas que aplicar tus contraseñas, sobre todo en banca online. Los cibercriminales tienen acceso muy fácil a estas redes y pueden usarlo para interferir estos datos sensibles y usarlos suplantando tu identidad. En caso de dudas, utiliza la conexión móvil.

 

  1. Presta atención a la navegación por Internet. Utiliza siempre direcciones web que empiecen por https://, el llamado protocolo seguro de transferencia de hipertexto. Evita descargar aplicaciones de sitios desconocidos, presta especial atención a las apps descargadas e intenta cerrar las sesiones de las páginas web que utilices normalmente.

 

  1. ¡Ojo con las apps! Al igual que ocurre con los sitios web, presta especial atención a las apps que te descargas, asegurándote de que pertenecen a sitios oficiales (Google Play o Apple Store). Además, una buena forma de asegurarte de que estas apps son de confianza es fijándote en las puntuaciones y comentarios positivos de otros usuarios.

 

  1. Cuidado con los USB y otros aparatos de almacenamiento externo. Pueden ser una fuente de infecciones y transmisión de softwares maliciosos.

 

  1. Vigila el correo electrónico. Un banco nunca te pedirá tus datos personales por correo electrónico. Los ciberdelincuentes utilizan textos muy llamativos apelando al sentido de urgencia para provocar que dejes tus datos personales: nunca lo hagas.

 

  1. ¡Ojo con lo que publicas en redes sociales! A todos nos gusta colgar una fotito mostrando lo bien que nos lo estamos pasando en nuestras vacaciones este verano. Sin embargo, no debes dar demasiada información de lo que haces, menos aún si no estás en casa. De esta forma, corres el riesgo de que terceras personas, no deseadas, aprovechen ese periodo en el que saben dónde estamos para entrar a nuestra vivienda y robar.

 

  1. Apaga las opciones de conectividad, como el GPS y bluetooth, no ser que sea necesario. Así impediremos que un cibercriminal pueda encontrar nuestra ubicación física. Además, en el caso del bluetooth, es posible que los cibercriminales utilicen lo que se conoce como “Bluebugging”. Un tipo de ciberataque que se aprovecha de vulnerabilidades en la autenticación del dispositivo para ejecutar comandos AT y tomar el control total del terminal, lo que podría derivar en el robo de datos, etc.

 

  1. Sobre todo, sentido común. ¡Evita cualquier cosa que sea sospechosa! Si recibes un adjunto en un correo electrónico que no esperas, no lo abras. No dejes tus dispositivos fuera de tu alcance o vista, guárdalos a buen recaudo. Utiliza contraseñas de acceso que no sean fáciles de adivinar y activa mecanismos del propio teléfono o externos antirrobo, que te permitan localizar, bloquear o formatear el dispositivo si en algún momento lo pierdes.

 

En un mundo de crecientes ciberamenazas y ciberdelitos, ¿qué puedes hacer para protegerte? La conciencia sobre la seguridad es la primera línea de defensa. Hay potentes herramientas de seguridad disponibles que te podrán ayudar, pero recuerda que, sobre todo, necesitas usar el sentido común para proteger tu ordenador, tu información y a ti mismo.

 

¡Os deseamos unas felices vacaciones!